Gobierno usa presupuesto de reconstrucción por tsunami para la caza de ballenas

El gobierno Japonés ha generado polémica al confirmar el miércoles pasado que planea utilizar parte de los fondos públicos destinados a la reconstrucción tras el tsunami y terremoto para reforzar la seguridad de su flota ballenera durante su cacería anual.

Greenpeace denunció que Tokyo estaba desviando dinero destinado a las víctimas del desastre por ¥ 2,280,000,000 ($ 30 millones USD) para reforzar la seguridad de su flota en contra de los grupos ecologistas.

La flota ballenera japonesa zarpó el martes para la caza anual de esta temporada en la Antártida unto con un grupo indeterminado de barcos de la guardia costera nipona para protegerlos de los activistas que se oponen a la caza de ballenas.

Un funcionario de la Agencia de Pesca, Tatsuya Nakaoku, dijo que la seguridad adicional fue diseñada para garantizar mayor efectividad en la caza y en última instancia, ayudar a las ciudades costeras que dependen en gran medida de la caza de ballenas a recuperarse del desastre del 11 de marzo.

«Este programa podrá ayudar a reconstruir las plantas procesadoras de alimentos basados en la carne de ballena.

En febrero, Japón interrumpió su caza para la temporada 2010-2011 por un mes después de haber obtenido sólo una quinta parte de sus capturas previstas, culpando del hecho a la interferencia del grupo ambientalista «Sea Shepherd».

El mes pasado, Japón aprobó un presupuesto de ¥ 12,100,000,000,000 extra, el tercero este año, para financiar la reconstrucción post-terremoto y reactivar la economía: cerca de ¥ 498.9 mil millones se destinaron a gastos relacionados con la pesca, incluyendo ¥ 2280 millones para «la estabilización en la investigación de las ballenas».

«Vamos a reforzar las medidas contra los actos de sabotaje por parte de grupos ambientalistas con el fin de llevar a cabo la «investigación» de la ballenas antárticas, dijo el departamento de pesca después de que el presupuesto fue aprobado.

La caza comercial de ballenas está prohibida por un tratado internacional, pero Japón desde 1987 utiliza un vacío legal para llevar a cabo «investigaciones letales» en las criaturas, en nombre de la ciencia.

Un trabajo de investigación de cuatro japoneses y un noruego sugiere que, en aguas subantárticas, las ballenas Minke han perdido un 9% de su grasa corporal en 18 años debido a la escasez del krill, probablemente por efecto del cambio climático. “Para evitar errores estadísticos”, se han cazado miles de ballenas de forma supuestamente legal (interés científico, aseguran) para comprobar que los pobres animales están cada vez más delgados por falta de comida.

Japón dice que en su opinión, hay una gran población de ballenas en el mundo para justificar su llamada «investigación», pero no oculta el hecho de que la carne de ballena de sus investigaciones termina en las mesas de sus hogares y en los costosos restaurantes.

Los grupos ambientalistas condenan esta actividad rutinaria porque la usan como fachada para disfrazar la caza comercial.

Fuente: AFP/JT

«Sea Shepherd» , organización ambientalista que se opone a la caza de ballenas