Féminas «luchan» por el chocolate el 14 de febrero
Mujeres japonesas se vieron envueltas en estampidas y codazos para comprar el chocolate de San Valentín en las tiendas el 14 de febrero, fecha en que se acostumbra que las féminas exclusivamente obsequien a los hombres la preciada golosina.
Si las chicas tienen suerte, los hombres harán lo mismo por ellas en el llamado «White Day», que se celebra en marzo, cuando tradicionalmente se da un obsequio de color blanco, tal vez dulces o bien ropa interior.
«Me duelen los pies, me duelen los brazos y me duele la cabeza!», dijo haciendo una mueca Kana Shimizu, aferrándose a dos bolsas llenas de chocolate belga que costaron más de 10,000 yenes, compradas en una tienda de lujo en el distrito de Ginza, en Tokyo.
«Esta es para mi novio, la otra es para mí. No quiero que él tenga toda la diversión», dice.
Después de haber invertido en el chocolate conocido como «Honmei-choco» (amor verdadero), la estilista de 27 años de edad, corrió a buscar un sitio menos lujoso para comprar el «Giri-choco» (chocolate de obligación) para sus compañeros de trabajo.
«Pareciera que el chocolate es barato», se rie, «No, en serio, es doloroso cada año».
Extensas zonas de grandes almacenes de Japón están dedicados al Día de San Valentín, con mostradores llenos de golosinas en forma de corazón, donde se exhiben chocolateros internacionales.
«Estoy aquí con mi esposa», dijo el arquitecto de 42 años, Riki Taniguchi.«Tengo mi ojo en el chocolate belga, pero no estoy seguro de que ella piense que lo merezco».
El día de San Valentín apareció por primera vez en Japón en la década de 1950 cuando la economía tomó fuerza después de la devastación de la Segunda Guerra Mundial y los productos occidentales eran altamente estimados, por lo que el país adquirió un gusto por la sofisticación y el lujo.
En ese momento, una firma que se llamaba Morozoff anunció el 14 de Febrero como «el único día del año en que una mujer profesa su amor a través de la presentación del chocolate», estableciéndose como el símbolo de romance de Japón, para disgusto de los floristas, los joyeros y fabricantes de ropa interior.
El chocolate ha estado disponible en Japón desde finales del siglo 18, cuando los comerciantes holandeses, los únicos europeos a quienes se les abrió las puertas, les pagaban con chocolate a las prostitutas.
Actualmente, las parejas niponas pueden compartir un plato de fideos ramen rociado de chocolate, papas y pollo frito cubierto de chocolate, o incluso, tomar un baño en chocolate caliente.
Fuente: JS/YEA