En la «cafetería de juguetes» no se permite el acceso a niñ@s

Tener una cafetería con un buen ambiente es fundamental en Japón, con la cantidad de ellos que abundan, por lo que asegurar que los clientes lleguen obliga a los empresarios a ser creativos para que su negocio sobresalga de entre toda la vasta lista de opciones.

Este es el caso de la cafetería «Toique» (un acrónimo de «juguete» -Toy-y «único» -Unique-), con sede en Tokyo y que pone a la disposición de sus clientes una gran cantidad de juguetes internacionales. Toique sólo tiene dos reglas que se deben cumplir, no fumar y no pueden entrar menores de 15 años.

El Sr. Shimizu, propietario de la lúdica cafetería, quiere romper el tabú de que  los adultos no pueden jugar con los juguetes, dándoles un lugar seguro para disfrutar de ellos. También cree que los adultos no pueden realmente disfrutar de una tienda de juguetes, con tantos niños alrededor.

Con esta idea en mente, el señor Shimizu abrió su café y el resultado es muy agradable. Con cada bebida que se compra, los clientes pueden permanecer durante una hora y disfrutar de cualquiera de los juguetes provenientes de Japón, Alemania y Suiza.

La clase de juguetes disponibles no son el típico videojuego, sino juegos didácticos y rompecabezas inovadores que son fáciles de jugar. Por ejemplo, está el Diamant Naef de Suiza, el cual es un objeto en forma de diamante conformado por 15 bloques que se pueden acomodar en una variedad aparentemente infinita de combinaciones.

También está el Via-J, que es un juguete japonés que también puede funcionar como una pieza decorativa para el hogar y que está fabricado en acrílico transparente en el que se ponen a rodar canicas multicolores. Algo un tanto parecido al Pachinko, pero silencioso y relajante par disfrutar de su bebida.

La cafetería de juguetes para adultos tiene un ambiente muy tranquilo. Nadie está gritando, llorando o peleando. De hecho, casi ninguno de los clientes emite palabra mientras está inmerso disfrutando de los juguetes. También en la cefetería se organizan talleres donde los adultos pueden realizar actividades y manualidades como si fueran infantes.

Fuente: JT/YEA