«Starman» japonés inicia misión en el día del «Tanabata»
El 7 de julio, día que en Japón se celebra el festival «Tanabata», el astronauta Takuya Onishi escribió sus grandes esperanzas para su misión antes de despegar hacia el espacio.
Onishi dijo que él y sus dos compañeros escribieron sus deseos para el éxito de la misión en hojas de papel «tanzaku», una tradición japonesa que se realiza durante el festival anual.
La nave espacial rusa Soyuz, con Onishi, el cosmonauta Anatoly Ivanishin y la astronauta estadounidense Kathleen Rubins a bordo, despegó del cosmódromo de Baikonur a las 7:36 de la mañana con destino a la Estación Espacial Internacional, lugar donde el nuevo equipo trabajará durante los próximos cuatro meses .
La cápsula espacial que lleva a los tres miembros de la tripulación se separó con éxito del vehículo de lanzamiento a los nueve minutos de vuelo a una altitud de unos 200 kilómetros.
«Queremos hacer este vuelo que transporta las esperanzas y los sueños de personas de todo el mundo y de todo Japón», dijo Onishi, de 40 años, en una conferencia de prensa celebrada en el centro espacial un día antes de su despegue.
Onishi, conocido como el «Hombre estrella», se enamoró del espacio cuando su padre lo llevó a ver una de las películas de «Star Wars» cuando estaba en segundo grado de primaria.
Su fascinación lo llevó a presentar un ensayo titulado «Sobre el estudio de las estrellas y constelaciones» para un proyecto escolar cuando era un estudiante de primer grado de secundaria.
En su ensayo, explicó que son los agujeros negros y también cómo localizar las constelaciones. Llegó a la conclusión de que «las estrellas eran algo que se miraba sin pensar, pero que eran muy interesantes cuando se observan más a detalle».
Onishi durante mucho tiempo dijo que ser astronauta era «un sueño que nunca pensó que se haría realidad».
Con su pasión por el espacio, decidió convertirse en un piloto al inscribirse en la Universidad de Tokyo en el Departamento de Aeronáutica y Astronáutica. Después de su graduación, se incorporó a la línea aérea comercial All Nippon Airways Co.
Después de trabajar en la línea aérea durante cinco años como copiloto, Onishi supo que la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) estaba buscando candidatos para astronautas. Él decidió darse una oportunidad y, finalmente, se convirtió en uno de los tres candidatos de entre 963 solicitantes que calificaron para el programa.
Si todo va según lo previsto, a la nave espacial de Onishi le tomarán 50 horas de vuelo para llegar a la estación espacial, que se encuentra en órbita a unos 400 kilómetros por encima de la Tierra.
Onishi está programado para llevar a cabo más o menos 20 experimentos y observaciones, incluyendo el manejo de ratones y sintetizar proteínas de alta calidad en un entorno de gravedad cero.
Un vehículo no tripulado de transferencia, el H-II de la JAXA, también conocido como Konotori, está programado para entregar baterías de iones de litio de fabricación japonesa y otros suministros a la EEI en el otoño. Onishi podría ser el miembro de la tripulación que operará el brazo robótico para enganchar al dron.
Onishi es el sexto astronauta japonés que participa en una misión de larga duración en la EEI.
Fuente: Asahi/YEA